Txetxu Rojo dejó una huella imborrable en el Real Club Celta de Vigo durante su etapa como entrenador. El técnico bilbaíno llegó al club gallego en enero de 1991, sustituyendo a otro exrojiblanco ilustre, Jose Mari Maguregi.
Durante su estancia en Vigo, Rojo logró importantes hitos para el equipo celeste. En la temporada 1991-92, consiguió el noveno ascenso del Celta a Primera División, devolviendo al club a la élite del fútbol español. Ya en la máxima categoría, el equipo de Rojo mostró una gran capacidad competitiva, basándose en una sólida defensa que le permitió mantener al Celta en Primera División de manera holgada en la temporada 1992-93.
Quizás el logro más destacado de Rojo con el Celta fue alcanzar la final de la Copa del Rey en la temporada 1993-94. Aunque el título se escapó en la tanda de penaltis ante el Real Zaragoza, este subcampeonato quedó grabado en la memoria de la afición celeste.
Rojo contó en su plantilla con una interesante mezcla de jugadores, incluyendo varios exjugadores del Athletic Club como Ángel Vélez ‘Moska’, Borja Agirretxu, Ismael Urzaiz, Joseba Agirre y Patxi Salinas. También destacó la presencia de jóvenes promesas como Jorge Otero, Santi Cañizares y Vicente Engonga, así como varios jugadores procedentes de la antigua Yugoslavia.
El legado de Txetxu Rojo en el Celta va más allá de los resultados deportivos. Vlado Gudelj, leyenda del club y actual delegado, recuerda con cariño las cualidades técnicas y humanas del entrenador vasco, quien le ayudó tanto en lo deportivo como en lo personal durante un período complicado para los jugadores bosnios.
Rojo dirigió al Celta durante tres temporadas y media, acumulando un total de 152 partidos oficiales con un balance de 53 victorias, 51 empates y 48 derrotas. Su paso por el club vigués lo convirtió en el segundo entrenador con más partidos dirigidos en la historia del Celta, solo superado por Víctor Fernández.
La etapa de Txetxu Rojo al frente del Celta de Vigo quedará para siempre como un período de crecimiento y consolidación para el club, marcado por el ascenso, la permanencia en Primera División y una memorable final de Copa.